Por Juan García (Todo a Babor)
En contra de lo que se piensa, sobre todo por las películas de Errol Flynn, no les fue fácil a los ingleses capturar los buques del tesoro españoles. Baste como ejemplo el caso de la conocida ruta llamada del «Galeón de Manila«, donde un gran buque mercante viajaba anualmente transportando valiosas mercancías entre México y las Islas Filipinas y que entre 1580 y 1810, es decir 230 años de continuos viajes, sólo fue capturado 6 veces por los ingleses. Y de ellos, no todos fueron enormes galeones cargados de riquezas.
De ahí que cuando lograban capturar alguno se pusieran tan contentos y se ocuparan de que todo el mundo se enterase, tal y como aparecía en las múltiples pinturas que se hacían para «conmemorar» dicho acontecimiento.
Estos buques, por cierto, no eran de la Armada, sino mercantes de Compañías comerciales, algo que también se suele obviar.