Por Oscar Salas Díez
Esta entrada pertenece a la la sección Apuntes sobre la construcción naval del siglo XVIII
Basado en la lámina nº.80 del diccionario de Navarro, desglosaré cada uno de los utensilios fundamentales que componían un cañón en defensa de costas. En este caso en particular, de un cañón de a 24 libras de hierro. La fecha a la que corresponden es de 1750. Maqueta realizada por el autor.
La Cuchara: Compuesta de un barreno, que en uno de sus extremos se colocaba una feminela, seguida de una manguilla que permitirá mantener firme la propia cuchara. Empleada como rascador del carbón adosado al ánima del cañón.
Una vez utilizada, garantizaba la entrada total de la bala.
Dimensiones: Largo del barreno = entre 20 cm mas largo que el anima del cañón. Esto es para uno de 24lb (2,92m), será 3,12m.
Largo y diámetro de la cuchara = de largo tres diámetros de su Bala y de diámetro el de su bala = 44,1 cm y 14,7 cm.
Materiales: Barreno: Hierro
Cuchara: Hierro batido.
El Sacatrapos: Compuesto de un asta de madera, que en uno de sus extremos se colocaba en vuelo enroscado y a modo de una línea heliaca elevada (Navarro) de hierro. Dimensiones: Asta de madera = 30 cm mas largo del anima del cañón.
Sacatrapos, de largo = 2 diámetros de su bala = 29,4 cm. Y de diámetro menor que el de la bala.
Atacador: Compuesto por un asta y un zoquete, ambos de madera. Empleado para comprimir tanto el cartucho al fogón del anima del cañón, como la bala a este y los tacos o bocados a la bala. También solía emplearse en vez del asta de madera un barreno de Hierro.
Dimensiones: El diámetro del zoquete = el de su bala = 14,7 cm y de Largo 1 diámetro y ¾ = 25,72 cm. En el de cabo era mas corto.
Lanada: Un asta de madera, que en un extremo se colocaba una lanada, con la finalidad de una vez humedecida, enfriar el ánima del cañón. El largo total era de 20 cm más del largo del ánima.
Estos cuatro componentes, en general eran independientes cuando su uso era en cañones en la costa, pero se combinaban en los navíos, más que nada por espacio.
Así, es común observar cuchara – atacador, atacador – lanada ó sacatrapos – atacador. También era común el empleo del atacador – lanada de cabo.
En la foto anterior, se observan dos astas de madera de 1/4 del diámetro del cañón, empleadas, para ayudar a retener el reculo del cañón luego del disparo, denominados espeques.
Recordemos que el empleo de palanquines para maniobrar el cañón y retener el reculo luego del disparo era práctica en la marina, no en fortines de costa.
Agujas (ahujas): Utilizadas para la limpieza del oído del fogón, siempre en número de dos, una de punta de hierro templado y la otra de diamante. Proporcionadas al largo del oído del cañón.
Pie de cabra: Uno de los utensilios indispensables y utilitario, en general en número de dos, empleados para mover la cureña, cambios de rueda, ayuda de retener por las ruedas el reculo del cañón, etc… De hierro, y en uno de sus extremos un doblez semejando el pie de una cabra. Sus dimensiones variables, pero por lo común de 1,39 m de largo.
Cuchillo: Indispensable en cada artillero, pero como mínimo uno en poder del Cabo de artillería.
Cartuchos de pergamino, porta cartuchos: Los porta cartuchos, generalmente de madera, y forrados interiormente con plomo, para garantizar el control de la humedad de la pólvora.
Las dimensiones para los de a 24 lb., de largo tres diámetros de la bala mas ¾ y de grueso el diámetro de su bala. Igual para los cartuchos de pergamino. Siempre se identificaba el diámetro de la bala, en el exterior de los porta cartuchos.
Pergaminos y caja de pergaminos: Para la elaboración de los cartuchos.
Embudo, medida de Pólvora, barril de pólvora, chifle, pergaminos, sunchos y cuerda mecha. Aunque como norma general, los cartuchos se llenaban de pólvora y se almacenaban en los porta cartuchos previamente, en fortines de costa se ensamblaban en sitio, si era necesario.
Botafuego: Implemento utilizado para hacer la ignición de la pólvora depositada en el oído del cañón. En general de 1,17 metros. En primer plano el modelo original, en segundo el modelo más conocido, pero posterior a 1756.
Cuba de agua y barrilete de agua: Uno para humedecer la lanada, y enfriar el cañón otro para consumo.
Cabos gordos y medios y morrones.
Barrilete de estopas y cabos viejos, tacos y bocados: En marina se cosían redes con meollar, para contener los tacos ó bocados.
Munición en chillera y Bitela ó pasabalas de mano: Una vez comprobados los diámetros de las balas, se organizaban en la chilera, colocándose cerca del cañón.
Cureña a la española, de solera continua y de una pieza: Realizada y alquitranada como era menester hasta 1756, aunque también se solían pintar con color de caoba o de rojo, en la marina.
Cambrión doble, banqueta de una pieza y cuña de puntería: El cambrión, aunque se empleaba de común en la marina, para retener el cañón en marejadas, resulto un utensilio de muchísima utilidad en fortines de costa, para las reparaciones de la cureña. La banqueta, para elevar el cañón y sostener la cuña de puntería.
Planchada de plomo: Empleada para tapar el oído del cañón, preservando así, la pólvora de la humedad. Sus dimensiones de largo tres calibres del cañón por dos calibres de ancho. Esto es 44,1 cm x 29,4 cm
Martillo de madera y Bandarria de hierro.
Cabo con gancho: Para maniobrar la cureña desde la gaza de la colilla, o desde los cáncamos de ojo ubicados en el escalón de colilla.
Corcha del cañón: Para tapar la boca del cañón, impidiendo que la humedad afecte el ánima. Solían pintarse de blanco (albayalde) a base de plomo.
Cañón de hierro: De a 24 libras, de largo 11 pies 1 pulgada (2,93 m.), el peso 5187 libras, el costo 3000 reales de vellón. Fabricado en Sevilla, 1750. Anima de 15,5 cm
La maqueta completa
Estos son los componentes indispensables, para que un cañón se considerase operativo. He obviado los utensilios de respeto (ruedas, ejes, etc.)
Las fotos corresponden al despiece de una maqueta realizada por mi, a escala 1:10.
Nota: El envejecimiento dado a cada componente, es o bien simulando el uso, ó simulando tratamientos para la época.