Todo a babor cumple 20 años divulgando la historia naval de España

Por Juan García (Todo a Babor)

¡Veinte años, que se dice pronto!

Pues sí, ya llegó el día. Hoy día 11 de mayo de 2023 la web de historia naval de España (y del mundo), Todo a babor, cumple la más que respetable cifra de 20 años.

En este entrada especial conmemorativa no voy a relatar los orígenes de la web, puesto que ya lo conté todo en el especial del 15 aniversario, así que estáis a salvo de una parrafada nostálgica al uso y esta entrada será mucho más breve. No os voy a aburrir más de lo necesario 🙂

Pero si alguno tiene la curiosidad de saber cómo creé la web, de donde viene el nombre, cómo fueron los comienzos y todos esos sabrosos datos os sugiero que vayáis al artículo referido.

Y es que han pasado cinco años desde aquel aniversario y ahora con una cifra tan redonda como son los 20 años es entonces cuando tomo conciencia del tiempo que ha pasado.

20 aniversario de la web de historia naval de España Todo a babor
Hace tiempo, los navíos se engalanaban con banderas para celebrar conmemoraciones o la llegada a un puerto en un día festivo. Creo que la elección de esta pintura refleja muy bien ese sentimiento festivo por el aniversario de la web. Detalle de la «Vista de la escuadra de S.M. Católica bajo el mando del Teniente general don Félix de Tejada, en ocasión de la visita hecha por S.M. el Rey de las dos Sicilias el 12 de junio de 1789». Archivo Histórico Nacional.

Llegar a los 20 años con una web que se actualiza regularmente, prácticamente cada semana desde hace años, siendo un proyecto personal como lo es todavía, es algo francamente raro, especialmente cuando, recalco, no se trata de un proyecto profesional.

No creo estar exagerando cuando afirmo que somos el portal en español de historia naval más antiguo de Internet, ya que las pocas webs relacionadas con este tema que existían cuando inicié Todo a babor, o bien no podían considerarse un portal como nosotros o desaparecieron hace años, o si aún siguen hace años que no se actualizan.

Sí, antes todo era campo en aquella época, en el año 2003, al menos en lo que se refiere a este tema tan concreto como lo es la historia naval de España por Internet.

En todos estos años espero haber puesto mi modesto granito de arena para que mucha gente haya descubierto la historia naval de España y conozca lo antigua e importante que fue.

Quiero pensar que Todo a babor ha colaborado de alguna forma a fomentar el gusto por esta parte de la historia como lo es la naval y especialmente la de nuestro país, que ha sufrido como ninguna otra los ninguneos y desconocimiento general. Una falta de respeto a una de las armadas más antiguas del mundo y con más distinguido historial.

Y aunque haya sido un impacto mínimo, me conformo. Y sé, porque muchos me lo decís en correos o mensajes en Redes Sociales, que así ha sido.

¿Cuántos autores de estos temas se han visto beneficiados por el flujo de usuarios «que les he pasado», al descubrir en mi web historias que luego quisieron ampliar leyendo sus libros? ¿Cuántos lectores conocen navíos, marinos o hechos de armas de nuestro país gracias a que lo leyeron por primera vez en Todo a babor y luego contaron con esos conocimientos que de otra forma nunca tendrían? ¿Cuántos saben de episodios de nuestra Armada que de otra forma jamás conocerían?

O también, si alguien ha ido a un museo naval y se ha detenido frente a un modelo de arsenal, o un cuadro y ha comentado: «Pues he leído en Internet que este buque estuvo la batalla de Trafalgar, y ese es Blas de Lezo«, por ejemplo, y ese Internet hayamos sido nosotros.

Y no es que esté fantaseando demasiado, lo sé porque vosotros, como digo, me lo habéis dicho. Porque correos he recibido en estos 20 años, cientos, sin exagerar.

Las miles de visitas mensuales de la web refuerzan mi afirmación. Por cierto, métricas confirmadas con medios profesionales, nada de contar, por ejemplo, como visita distinta cada vez que alguien navega por distintas páginas de una misma web, que eso lo veo mucho y tiene fiabilidad cero.

¿Por qué os comento esto de las visitas? Pues tiene su importancia (bastante), porque si nuestra web no tuviera lectores, ¿qué sentido tendría seguir con ella? Afortunadamente esto no es así y desde hace ya muchos años no tenemos que preocuparnos a ese respecto.

Colaboradores: la gente que de verdad mantiene esto

Como ya sabéis, lo más notorio que ha ocurrido en estos últimos años ha sido la maldita pandemia global, que nos dejó a todos encerrados en casa durante una temporada.

¿Qué hice yo mientras otros hacían vídeos jugando con el (escasísimo) papel higiénico en sus maravillosos y enormes jardines privados? Pues transcribir artículos como loco, de interesantes y reconocidos autores a los que me hinché a pedir autorizaciones y que, en su mayoría, aceptaron encantados de ver parte de su trabajo en nuestra web.

Muchas gracias de nuevo a todos esos académicos, profesores, historiadores, y demás profesionales de la historia por dar más caché a esta veterana web.

Como recordatorio a todos los posibles interesados, podéis colaborar con la web cuando lo deseéis. En los últimos tiempos, nuevos autores, incluyendo algunos escritores, han ofrecido su conocimiento de forma altruista. A cambio, les brindamos un buen escaparate para darse a conocer o promocionar sus últimas obras.

Ya lo dije en el artículo del anterior aniversario, pero los escritores de estos temas tienen en Todo a babor un aliado. No me repetiré más, pero no aprovechar las miles de visitas, con sus potenciales lectores, es desperdiciar un medio. Y además gratis 🙂

En estos años más recientes, además de los demás colaboradores puntuales, hemos tenido varios autores que de manera regular han publicado sus artículos con nosotros.

De entre todos estos colaboradores, no puedo dejar de mencionar el enorme trabajo y dedicación de Santiago Gómez, quien de un tiempo a esta parte ha vuelto a colaborar de forma asidua con la web, como hacía desde casi los principios de la web, con artículos sobre hechos navales destacados de nuestra Armada y, sobre todo, con sus historiales de navíos, fragatas y otros buques menores. Muchas gracias Santiago, ya sabes que aquí tienes tu casa.

En este tiempo Santiago también ha publicado un par de tomos sobre los historiales de navíos de la Real Armada del siglo XVIII, que deben ser de consulta obligada para los que quieran profundizar más en las acciones de Armada de la época y sus emblemáticos navíos de línea.

Entre los colaboradores habituales que merecen especial mención, se encuentra Guillermo Nicieza, conocido por muchos de vosotros por sus hilos de Twitter cuidadosamente elaborados, y, sobre todo, por su gran obra «Leones del mar. La Real Armada española del siglo XVIII» o el más reciente «Anclas y Bayonetas«. Guillermo ha contribuido con varios artículos en esta página web, que aportan conocimiento sobre episodios de nuestra historia naval que han quedado olvidados.

Por supuesto, no me olvido de Carlos Parrilla, que con sus maravillosas pinturas sigue dando color a la web. Y que también tiene su propio libro con sus mejores cuadros. Carlos es el colaborador más antiguo que continúa con nosotros (también casi desde los inicios), mandándome de forma regular sus preciosas pinturas para que las disfrutéis todos.

Hay muchos otros que han aportado su conocimiento, incluso con cabida a historias menos al uso pero igual de interesantes, tal es el caso de los misterios navales traídos por Abraham Pickman, o los artículos de Eduardo Casas Herrer con sus interesantes y desconocidas acciones de algunos de nuestros buques más modestos.

De los colaboradores de siempre, los que han estado con la web casi desde sus inicios, tengo que nombrar a Luis Villoslada, quien siempre ha estado ahí para cualquier cosa que hiciera falta, incluidos cañonazos 😉

Todos los demás colaboradores, que de forma más o menos puntual han ayudado a que esto crezca, también merecen un reconocimiento y por eso están todos en un listado en la sección de colaboraciones. Habéis sido tantos que es imposible poneros a todos en esta entrada especial.

Ese listado, por cierto, lo cree hace muchísimos años, y ha ido llenándose de nombres poco a poco. A veces me asombra la cantidad de gente que ha formado parte de esta tripulación en algún momento de la web.

Cuestiones varias

En estos últimos años he pasado la mayor parte del contenido que estaba en la parte antigua de la web a la actual, aunque he dejado los listados porque, poco a poco, los vamos actualizando con nuevos datos aportados por Santiago Gómez. En la parte anterior también quedan las tablas de buques apresados y demás información más de tipo apéndice, que creo que no merece la pena el esfuerzo de traerlo a la parte actual.

Todo lo demás, como digo, los artículos, han sido trasladados casi al 90% lo cual ha sido un trabajo tedioso y lento, pero que me alegra de haber completado porque los lectores los encontrarán más fácilmente y disfrutarán de las correcciones y actualizaciones que he realizado en muchos de esos contenidos anteriores.

Porque esa es otra, llevar esta web no sólo es publicar una entrada mensual. Lleva mucho trabajo detrás, que a veces no es tan gratificante como otras tareas, ya sea arreglando fallos, actualizando contenidos, corrigiendo, modificando estilos y maquetaciones, solicitando permisos, documentándome cuando elaboró mis propios artículos, … Y muchas otras cosas que me olvidó o prefiero olvidar 🙁

Otra cuestión que me veo en la obligación de recordar es el tema de las consultas que me hacéis a veces. Cuando alguno me manda un correo solicitando ayuda, por ejemplo, para encontrar el nombre del buque en el que llegó su abuelo a su país, o el nombre de algún oficial que fue antepasado suyo.

Tenéis que tener en cuenta que esas son consultas que me son imposibles de atender porque no dispongo de forma alguna de investigar esos datos. Es fácil mandar un correo, pero no os va a servir de nada, entendedlo. Todo a babor no es una base de datos. Nunca lo ha sido ni lo ha pretendido: sólo buscamos la divulgación.

Si tenéis alguna consulta algo más accesible podéis hacerla en Twitter, donde si puedo os ayudaré o lo hará alguno de nuestros seguidores que esté mejor informado.

Me encantaría ser más activo en las redes sociales, sobre todo en Twitter que lo frecuento más, pero muchas veces no puedo compaginar todo esto y dedicarme a hacer esos hilos que sé que tanto os gustan. A veces sí que saco tiempo y hago alguno, pero no es lo normal.

Intentaré ponerme las pilas en este tema, pero no prometo nada. Las redes sociales no son lo mío, lo confieso, pero también reconozco que son la mejor forma de darse a conocer y son un buen escaparate.

Y seguimos… y seguiremos

Después de tantos años, es cierto que ha habido temporadas en las que he sentido más o menos motivación para dedicar tanto tiempo a la web, no voy a engañaros. Sin embargo, en líneas generales, creo que he sabido mantener un equilibrio satisfactorio entre llevar el proyecto actualizado y seguir con la motivación necesaria.

Es posible que en un futuro el ritmo de las actualizaciones varíe, para bien o para mal, pero que eso no os inquiete, al final siempre estaré por aquí. Quién sabe qué cosas nos depararán los años venideros, pero seguro que ahí estaréis conmigo para verlo.

Ha llegado el momento de ir terminando estas parrafadas antes de que alguno se me canse de leer. No sin antes agradecer de todo corazón a todos los que han hecho posible Todo a babor durante estas dos décadas: a los lectores, a los colaboradores y a la familia.

Gracias por creer en este proyecto, por acompañarlo en su trayectoria, por ofrecer vuestras palabras de aliento en los momentos difíciles, por compartir vuestras historias y por enriquecer la historia naval de España con vuestro conocimiento.

Para mí ha sido un honor y un placer llevar a cabo este proyecto durante estos 20 años, y aunque llega el momento de cerrar esta entrada conmemorativa, Todo a babor seguirá navegando por la red, divulgando nuestra historia naval a todos los interesados en este fascinante tema.

Espero que sigamos navegando juntos durante muchos años más. ¡Nos vemos en cubierta!

Compartir
Twittear
Pin