Por Santiago Gómez Cañas
Autor del libro: «Historiales de los navíos de línea españoles, 1700-1850»
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Historiales de las fragatas españolas (XVIII-XIX)
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Historial de la fragata Anfitrite, advocación de Santa Úrsula
Última fragata botada en el arsenal de la Habana, en 1796, mandada construir por Real orden de 27 de julio de 1793. Proyectada por el ingeniero Julián Martín de Retamosa y construida por el ingeniero Honorato de Bouyon Serze.
Meses antes de su botadura, el 10 de septiembre de 1795 llega a la Habana, procedente de Ferrol y Cádiz, la urca Sª Florentina, al mando del capitán de fragata Fernando Ruiz Gordon, con géneros y pertrechos del aparejo pendiente, artillería y demás géneros para la fragata Anfitrite, aún en construcción.
El 16 de mayo de 1797 zarpa de la Habana con la fragata Nª Sª de la O, los bergantines Resolución y Príncipe, la goleta S. Bruno y la balandra Ventura, todos al mando del jefe de escuadra Francisco Javier Muñoz.
Debían dar caza a un navío británico que había capturado a cuatro de los nueve buques mercantes de un convoy salido de Cartagena de Indias. El 20 de mayo regresan los dos bergantines y la balandra. El 24 de mayo regresa el resto de la división con la fragata Tetis.
El 6 de junio de 1797 zarpan de la Habana los buques del capitán de navío Tomás de Ugarte, comandante del navío S. Lorenzo, con las fragatas Anfitrite y Tetis, bergantines S. Antonio y Príncipe y goleta Ariel.
Estaba al mando del capitán de fragata Casimiro de la Madrid. Debían expulsar a los británicos de la costa de Honduras. Cumplida la comisión, el navío de Ugarte y las dos fragatas fondean en julio de ese año en Veracruz al no poder regresar a la Habana a causa de una escuadra británica que se encontraba bloqueando el puerto.
Desde comienzos de enero de 1798 estaba en la Habana lista para zarpar con la fragata Juno y el bergantín Galgo para repartir el situado en Puerto Rico y Santo Domingo.
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La comisión queda detenida por la presencia de buques británicos. El 31 de enero de 1798 zarpa de la Habana con la fragata Juno, la corbeta Diligencia y los bergantines Galgo y S, Antonio, mandados por el capitán de navío Juan José de Elizalde, de la Anfitrite.
Debían capturar un convoy británico salido de Jamaica. La fragata Anfitrite entra en la Habana el 1º de febrero con una goleta presa por no llevar el pasaporte, haciéndose de nuevo a la vela.
El 4 de febrero avistan al convoy escoltado por siete navíos y nueve a doce fragatas. Ante fuerzas tan superiores, entran en la Habana las dos fragatas, mientras la corbeta y los bergantines se refugian en Matanzas perseguidas por un navío y dos fragatas enemigas.
La escuadra enemiga bloquea la Habana hasta finales de febrero. La corbeta y los dos bergantines entran en la Habana el 18 de marzo de 1798.
El 16 de febrero de 1798 se hacen a la vela la fragata Anfitrite, el bergantín Volador y la goleta S. Bruno a dar caza a una embarcación sospechosa. Regresan a la Habana al día siguiente sin haberla encontrado.
En marzo de 1798 estaba en Veracruz con la fragata Juno. Estas dos fragatas zarpan el 23 de marzo rumbo a la Habana en conserva de los navíos S. Ildefonso y S. Fulgencio y las fragatas Esmeralda, Clara y Medea, llevando a bordo unos siete millones de pesos.
Con la presencia de buques británicos en las costas cercanas a la Habana y en el Canal de Bahama, se decide en Junta el 19 de marzo de 1798 la salida de una escuadra de dos navíos y tres fragatas para dar protección a numerosos buques con varios destinos. Zarpan el 27 de marzo los navíos Ángel de la Guarda y S. Ramón, las fragatas Anfitrite, Juno y Tetis, los bergantines Galgo y S. Antonio y la goleta Elizabeth.
Escoltan hasta la boca del Canal de Bahama a los bergantines correo Golondrina, Recurso y goleta S. Antonio y a varios mercantes. El 1º de abril regresan a puerto la fragata Tetis y los bergantines Galgo y S. Antonio, quedando el resto de la división patrullando la costa de sotavento, regresando a puerto el 6 de mayo de 1798.
El 19 de mayo de 1798 se pone al mando del capitán de fragata Juan Elizalde y Uztariz, desembarcando en la habana por enfermedad al poco tiempo. Es destinada en mayo de 1798 a llevar el situado a Puerto Rico (209.000 pesos) y Santo Domingo.
El comandante de Marina Juan de Araoz dispuso la salida de la fragata Anfitrite el 25 de mayo para llevar el situado a Puerto Rico y Santo Domingo, aprovechando la salida del navío S. Pedro Alcántara y la fragata Sª Brígida, que llevan caudales a la península, y ordena al capitán de navío graduado Elizalde, ya recuperado de su enfermedad, dirigirse después a Costa Firme a llevar al comandante y oficiales de la fragata Hermione y regresar después a la Habana.
La salida a finales de mayo no se realiza y zarpa de la Habana el 2 de junio de 1798 para llevar el situado a Puerto Rico y dejar allí los de Santo Domingo, al mando interino del capitán de navío graduado Juan José de Elizalde. Lo hizo en conserva del navío S. Pedro Alcántara y la fragata Sª Brígida, que llevan caudales a la península, escoltados por el navío S. Lorenzo, las fragatas Juno y Tetis y los bergantines Galgo y S. Antonio.
Ese mismo día salieron el correo para España Lanzarote, la goleta de la Florida Mónica, la fragata mercante Preciosa y la goleta de correos para España Sevillana. Al amanecer del 4 de junio se separa la escolta, el navío S. Lorenzo, las dos fragatas y los dos bergantines.
La Anfitrite llega a Puerto Rico el 27 de junio a pesar del acoso de varios buques de guerra británicos, que después bloquean a la fragata española en puerto hasta el 12 de julio. Se hizo a la vela al día siguiente y llega a Nueva Barcelona el 22 de julio para dejar allí al comandante, capitán de fragata Ramón de Echalar, y oficiales destinados a embarcar en la fragata ex británica Sª Cecilia (a) Hermiona.
Enterado Elizalde de que en Cumaná estaban detenidos dos correos, el bergantín Pájaro y la fragata Alcudia, que habían salido de La Coruña el 4 de mayo y el 8 de junio, bloqueados por un bergantín y una goleta británica de guerra, parte para dicho puerto la mañana del 26 de julio. Embarca la correspondencia y se hace a la vela con los dos correos.
El 31 de julio se separa el Alcudia para La Guaira y llega a la Habana con el correo Pájaro a las dos y media de la tarde del 13 de agosto de 1798.
En abril de 1799 llega a la Habana desde Matanzas la barca Paloma, al mando del primer piloto Andrés Ramos, con azogues, papel sellado y bulas destinadas a Veracruz, teniendo que entrar en el arsenal para hacer reparaciones.
El comandante de Marina Araoz decide embarcar los efectos de la barca en la fragata Anfitrite para llevarlos a Veracruz, dado que la fragata debía partir a ese puerto a recoger caudales, mientras que la barca saldría para la península cargada de tabaco.
Al mando del capitán de fragata Martín Funes, zarpa de la Habana el 6 o 7 de julio de 1799 con la fragata Tetis y la corbeta Diligencia para recoger en Veracruz los caudales del situado, divisando en la costa cubana el 9 de julio una vela sospechosa.
Era la corbeta británica Arab, de 20 cañones, capitán Thomas B. Capel, que presenta su costado a una de las fragatas, siendo barrido su costado por la fragata española, que desmonta un cañón, mata a tres marineros, hiriendo de gravedad a otros dos. La corbeta enemiga responde al fuego, pero opta por huir hacia el norte.
Llegan a Veracruz el 19 de julio, con la carga de azogues, papel sellado, bulas y mercancías de particulares. Con el mismo destino habían salido de la Habana el 16 de julio el navío Asia y la fragata Sª Brígida.
Poco después de salir las dos fragatas, llega a la Habana un correo del virrey de Nueva España pidiendo una o dos fragatas para llevar caudales a Cádiz. Juan de Araoz y el comandante de la escuadra de la Habana Gabriel de Aristizábal escriben al virrey para que elija dos de las tres fragatas que estaban en Veracruz para realizar esa comisión.
A juicio de Araoz las fragatas destinadas a llevar los caudales a Cádiz debían ser la Brígida y la Tetis, mientras que la Anfitrite debía repartir los situados con el navío Asia. Con el mismo navío Asia y las fragatas Sª Brígida y Tetis zarpa de Veracruz llevando a bordo cuatro millones de pesos y otro millón en mercancías.
Llegan a la Habana el 11 de septiembre, evitando en la travesía a los buques británicos apostados para capturarlo. Las fragatas Brígida y Tetis se separan en las costas cubanas y ponen rumbo directo a Cádiz.
El 3 o 4 de octubre de ese mismo año zarpa de la Habana con el navío Asia para realizar varias comisiones. Escolta de una goleta correo a San Agustín de la Florida, la cual llevaba 80.000 pesos del situado, y a otro correo y siete mercantes que llevan rumbo a la península.
En el Canal de Bahama, se separan el navío y la fragata, al mando del brigadier Francisco Antonio de Montes Pérez, y se dirigen a Puerto Rico.
Desembarcan 586.000 pesos, zarpando poco después, el 6 de noviembre, hacia a Santo Domingo para dejar 1.114.000 pesos.
En la travesía de regreso a la Habana navegan con el bergantín Galgo, que se separa la noche del 14 de noviembre. Al día siguiente avistan un convoy de 31 velas que se dirige a Jamaica, escoltado por la fragata Crescent, de 36 cañones, y la corbeta Calypso, de 16 cañones. La fragata británica se acerca para reconocer a los buques.
Al ver que eran españoles, consigue zafarse de ellos, pero en su fuga apresa al bergantín Galgo. El navío y la fragata dieron caza al convoy, pero solo el navío consigue rendir a la fragata General Goddard tras dispararla diez cañonazos.
Era un «Indiaman» de 800 toneladas, mandado por el capitán John Bennet, tripulado por 60 hombres, 13 pasajeros, y armado con 14 cañones x 9 libras en batería y combés y 2 x 9 y 4 x 4 libras en el alcázar.
El comandante Montes manda a bordo del mercante un oficial, 12 marineros y cinco soldados como tripulación de presa. El valor de la presa y carga se valoró en 440.000 pesos. Llegaron a la Habana el 16 de diciembre.
A finales de mayo de 1800 estaba en el apostadero de la Habana, junto a los navíos S. Ramón, S. Ildefonso, S. Pedro Alcántara y Asia, los bergantines S. Antonio y Flecha y la goleta S. Bruno. La fragata Anfitrite disponía de una dotación de 173 hombres (7 oficiales de guerra, 7 oficiales mayores, 17 oficiales de mar, 41 tropas de infantería, 16 tropas de artillería, 40 artilleros, 20 marineros y 17 grumetes, 2 pajes, más 6 en el hospital y convalecientes), faltando 159 según el reglamento.
La primera semana de octubre de 1800 zarpan de la Habana los navíos S. Pedro, S. Ildefonso y S. Ramón y la fragata Anfitrite para dar caza a varios buques británicos. Se habían concedido el mando de la división al jefe de escuadra Francisco Javier Muñoz el 25 de septiembre, con insignia en el S. Pedro Alcántara.
Regresan a puerto el 12 de octubre, dejando al capitán de navío Juan José Elizalde, comandante a la fragata, de crucero dos o tres días más para dar caza a un corsario británico que navega al E, a tres o cuatro leguas del puerto, al menos hasta que la fragata mercante Mexicana, que estaba en Mariel, llegue a la Habana.
El 4 de mayo de 1801 toma el mando de la fragata el brigadier Francisco de Montes Pérez, zarpa de la Habana el 8 de mayo en conserva del navío S. Ramón y seis lanchas cañoneras con la misión de escoltar un convoy al puerto de Jaruco.
De regreso a la Habana, se separan los dos buques el 12 de mayo. Mientras la fragata continúa su rumbo a la Habana, el navío fue acosado por una división británica de un navío, dos fragatas y cuatro corbetas. El 22 de julio de 1801 zarpa de la Habana la fragata Anfitrite con el navío S. Ildefonso para proteger la llegada del navío S. Ramón desde el puerto de Matanzas.
Entraron en la Habana el 24 de julio. Vuelve a salir de la Habana al mando del brigadier Montes y, a sus órdenes, los navíos S. Ildefonso y Asia. Escoltan desde los puertos de barlovento a la Habana a unas 50 naves cargadas de azúcar, burlando a las embarcaciones enemigas.
Durante dos años estuvieron retenidos en Veracruz los caudales del situado en las fragatas Nª Sª de la O, Juno, Gloria y Minerva. Se celebraron varias juntas en la Habana. En la última del 19 de octubre, convocada por el gobernador de la Habana, marqués de Someruelos, se decide que salgan de la Habana rumbo a Veracruz los navíos S. Ildefonso, S. Pedro Alcántara y S. Ramón, la fragata Anfitrite y el bergantín Flecha, mandando la división el capitán de navío Dionisio Alcalá Galiano.
Aprovechando esta salida, debían salir los buques correo Príncipe y Urquijo. Se hicieron a la vela el 24 de noviembre de 1801 los tres navíos, la fragata y el bergantín. Llegan a Veracruz el 14 de diciembre.
La fragata estaba al mando del capitán Tello Mantilla. Tras ser carenada, zarpa de Veracruz el 15 de enero de 1802 en conserva de la fragata Juno rumbo a Cádiz con caudales.
Por enfermedad del capitán de fragata Tello Mantilla, graduado de capitán de navío, el comandante de marina Juan de Araoz resuelve conceder el mando al capitán de fragata Francisco del Río, que había desembarcado por enfermedad del navío S. Pedro Alcántara, pero ya está restablecido.
Al mando del capitán de fragata Francisco del Río, el 14 de febrero de 1802 sale de la Habana con la fragata Juno rumbo a la península con caudales.
Lleva de transporte al JE Francisco Javier Muñoz. Se separan el 23 de febrero y llega de arribada a Puerto Rico el 4 de marzo para reparar las averías en la arboladura, desarbolada del palo mayor y trinquete, y del mastelero de velacho, a causa de las tormentas que encontraron. La Juno llega desarbolada del palo mayor. Araoz dispuso la salida de la Habana de la fragata Soledad, capitán Antonio García de Quesada, para llevarla socorros.
Tras embarcar al tercer batallón del regimiento África, zarparon el 1º de octubre de 1802. Encontraron de nuevo fuertes tormentas y las dos fragatas se separan, perdiéndose en un naufragio la Juno a finales de octubre cuando se dirigía al puerto de Boston, mientras la Anfitrite llega a Cádiz.
En enero de 1804 es puesta al mando del capitán de fragata Juan José Varela y Ulloa. El 31 de enero de 1804 sale de Cádiz rumbo a Veracruz y la Habana. Zarpa de la Habana en conserva de la fragata Nª Sª de la O, llevando a bordo unos portadores de granos vacunales, entrando en Veracruz el 1º de abril.
El 29 de mayo recibe el virrey de Nueva España la Real orden de 22 de febrero de 1804 por la que debía despachar con caudales a la península las fragatas que estaban en Veracruz, entre ellas la Anfitrite. Contaba el 7 de junio con 261 hombres a bordo y 49 en el hospital. Zarpa de Veracruz el 9 de junio con las fragatas Venganza y Sª Sabina.
Al hacerse a la vela llevaba la Anfitrite una dotación de 291 hombres y 3.400.000 pesos de S.M. Tras arribar en la Habana por una epidemia que causó varios muertos y enfermos, se hace de nuevo a vela el 8 de julio y regresa a Cádiz el 18 de agosto de 1804 con caudales.
Francia y Gran Bretaña estaban de nuevo en guerra desde mayo de 1803. El rey Carlos IV no deseaba una nueva guerra, tenía que reponerse de las pérdidas de la anterior guerra y rehacer su maltrecha economía, pero Francia presionaba a España y la reclama que cumpla el pacto o alianza firmado en San Ildefonso el 18 de agosto de 1796.
Napoleón Bonaparte acepta que España se mantenga neutral, a cambio de una compensación económica, pagar 24 millones de reales al mes, mientras dure la guerra, y así evitar la declaración de guerra.
Gran Bretaña también presiona, no iba a permitir la entrega de ningún subsidio a Francia a cambio de la neutralidad, que sería considerado como un subsidio de guerra. España había pasado de ser neutral a no beligerante, situación muy incómoda que ponía los puertos y buques españoles en el punto de mira de los buques de guerra británicos.
Además del conocido ataque a las cuatro fragatas españolas de José de Bustamante y Guerra en aguas de cabo Santa María y la posterior explosión de la Mercedes el 5 de octubre de 1804, los británicos atacaron numerosos buques de guerra y mercantes españoles.
En enero de 1804 ya habían atacado, en aguas de Santo Domingo, la fragata británica Eolus a la corbeta de guerra Urquijo, de 20 cañones, construida en La Coruña en 1799 para el servicio de Correos.
Fallecido su comandante, el teniente de navío Manuel Fernández Trelles y otro oficial, y heridos cuatro oficiales y dieciséis hombres, es llevada a Jamaica y posteriormente devuelta.
La fragata Santa Matilde es capturada el 23 de octubre, al día siguiente de su salida de Cádiz, por el navío Donegal, de 88 cañones, y la fragata Medusa, de 44, la Santa Gertrudis es capturada el 7 de diciembre de 1804, también en el cabo de Santa María, por un navío y una fragata británica, cuando, al mando del teniente de navío Salomón, había salido de Cádiz rumbo a Manila por cuenta de la Real Compañía de Filipinas.
Pero vamos con el caso de la Anfitrite, capturada el 19 de noviembre.
A las dos de la tarde del 17 de noviembre de 1804 zarpa de Cádiz, al mando del capitán de fragata Varela y Ulloa, a llevar despachos y pertrechos a Tenerife, la Habana y Veracruz.
A las tres horas de haber zarpado avista, por la mura de estribor, un navío atravesado a unas 4 o 5 leguas, dando comienzo a una persecución de cuarenta y dos horas por parte de un navío británico, el Donegal, de 88 cañones de a 36 y 18 libras, el mismo que había capturado a la fragata Matilde.
Al perder toda la esperanza de escapar, por haber roto parte de la arboladura, el mastelero del juanete mayor y otros daños, Varela ordena detener la fragata cerca de cabo Cantín. Desde el navío británico, que pasaba por la popa de la fragata, se le ordena a Varela que se les envíe un oficial en un bote.
En el momento de echar el bote al agua dispara el navío un cañonazo, seguido por los disparos de su batería del alcázar, siendo respondidos por la fragata. Suspendido el fuego, el británico vuelve a pedir el bote, y el alférez de navío Rafael Lobo sube a bordo del navío británico.
Quince minutos después, el alférez Lobo regresa a la fragata con una carta de su capitán Richard John Strachan, en la que hacía saber que no podía permitir que buques de guerra entren o salgan de Cádiz, por lo que debía acompañar al navío a reunirse con la escuadra británica. Le daba solo tres minutos para deliberar.
Varela acepta, siempre que se le permita llevar ondeada la bandera española porque no entendía que fuera como prisionero al no haber estado de guerra entre las dos naciones. La guerra se declaró el 12 de diciembre.
El alférez Lobo embarca de nuevo en el bote para llevar la respuesta. Estando el bote a mitad de distancia entre los dos buques, el navío británico dispara a una distancia de tiro de pistola por la aleta de babor de la fragata, respondiendo la fragata al fuego enemigo.
Pasados veinte minutos, la fragata estaba desarbolada de sus tres palos, entraba mucha agua y tenía muchas bajas, 20 muertos, entre ellos Varela por una bala de fusil, y bastantes heridos, entre ellos el guardiamarina Julio Ponce, el 2º piloto José Solórzano, el pilotín Antonio Rodríguez.
Los oficiales deciden en Junta rendir la fragata, arriando la bandera el segundo al mando, el teniente de navío Agustín Blondo y Zavala. A la fragata llegan en botes desde el navío británico 3 oficiales, 5 guardiamarinas y 108 hombres para marinarla. Según la carta del capitán Strachan, a Varela le daba solo tres minutos para deliberar, aunque también señalaba en esa misma carta que el envío del bote con la respuesta, como así se hizo, daba a entender que se aceptaba lo que pedía.
La fragata es llevada a Gibraltar y los oficiales, guarnición y tripulación son desembarcados en Algeciras el 6 de diciembre.
Según algunos escritos, la mayoría de historiadores británicos, el enfrentamiento tuvo otro comienzo, que contradice en algunos aspectos al proporcionado por el teniente Blondo, sin duda alguna para justificar el ataque a traición.
Sir Richard, comandante del Donegal desde 1802, no hablaba español y el capitán Varela no hablaba inglés, por lo que era muy difícil intentar un intercambio de información entre los dos comandantes.
Sir Richard le dio a Varela tres minutos para deliberar su rendición, pero después de esperar seis minutos sin respuesta, decidió abrir fuego contra la fragata.
Para alegría de Napoleón Bonaparte, al Gobierno español no le quedó otra salida que declarar la guerra a Gran Bretaña.
La fragata entra al servicio de la Royal Navy como Anfitrite. Es nombrada Blanche el 3 de diciembre de 1805 y naufraga el 4 de marzo de 1807 en Ushant.
Dimensiones
En pies y pulgadas de Burgos: Eslora de 164 pies y 4 pulgadas, Quilla 146 y 4, Manga 46 y una pulgada, Puntal 21 y 7, calado a popa 19 y 4, calado a proa 18 y 2, Batería en medio 7 pies y 6 pulgadas. Lastre: 3.050 quintales (2.700 de hierro y 350 de piedra). Arqueo: 742 1/6 toneladas.
Artillado
28 x 18, 12 x 6, 4 ob. x 32, 2 ob. x 24 y 8 ob. x 3 libras.
En 1804 contaba con 30 x 24, 12 ob. x 24 y 12 ob. x 3 libras.
Bibliografía
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- Gaceta de México, tomo IX, nº 54, sábado, 03/08/1799, p. 427.
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Fuentes documentales
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- AGMAB. EI, leg. 22, doc. 016, 168. Año 1797.
- AGMAB. EI, leg. 23, doc. 013, 012, 015, 050. Año 1798.
- AGMAB. EI, leg. 24, doc. 006, 013. Juan de Araoz a Juan de Lángara. Habana, 24/05/1798.
- AGMAB. EI, leg. 26, doc. 006, 011, 013, 099. Año 1799.
- AGMAB. EI, leg. 27, doc. 007, 022. Año 1800.
- AGMAB. EI, leg. 28, doc. 034, 064. Año 1801.
- AGMAB. EI, leg. 32, doc. 004, 007, 036. Año 1802.
- AGMAB. EI, leg. 35, doc. 107. Año 1804.
- Archivo General de Indias (AGI). Estado, 26, N.22. Año 1797.
- AGI. Estado, 67, N. 54. Año 1798.
- Archivo General de Simancas (AGS). Secretaría de Guerra (SGU). Leg. 7140, 22. Año 1798.
- AGS. SGU, leg. 6867, 34. Año 1800.